Quizás para muchos decirles que el lavado de las manos es importante constituye algo obvio, una sugerencia que sobra. Pero no, porque es mucho más.

Esos que lo interpretan solo como una acción elemental, deben también tomarlo como una indicación médica, una advertencia salubrista.

Sucede que en las manos se albergan miles de gérmenes trasmisores de enfermedades, principalmente diarreicas y respiratorias agudas, entre otras infecciones que causan alrededor de 3 millones y medio de muertes en niños menores de 5 años, sin contar los nefastos efectos que también sufre el resto de las personas.

Y hay baja percepción de ese riesgo, pues uno de los problemas de nuestra población es la falta de conocimiento sobre la importancia de la higiene que proporciona el lavado de las manos de forma sistemática, en repetidas ocasiones en el día.

Lavarnos bien las manos

El lavado de manos es una de las medidas más efectivas para prevenir o reducir la propagación infecciones.

De ahí la insistencia de los especialistas en salud en esa aparente simple pero importante acción de higiene, más aun cuando está demostrado que el 50 por ciento de los brotes epidémicos de enfermedades se deben a un inadecuado proceder en el lavado de las manos.

Mas, no siempre se efectúa bien ese acto, entonces ¿cómo lograrlo correctamente? Solo necesita lavar sus manos durante medio minuto con agua y jabón para lograr la eliminación eficaz de gérmenes. Debe frotarlas por arriba, en las palmas, entre los dedos, y finalmente enjuagarlas con abundante agua.

Ello se hará cada vez que se llegue de la calle, que se vaya a ingerir alimentos, después de ir al baño, y en cuanta ocasión sea necesaria para garantizar manos limpias.