La Habana, Cuba. – Quiso el destino que el 19 de mayo de 1890 naciera el líder vietnamita Ho Chi Minh, y ese día, de 1895 cayera en combate José Martí.

Son El Apóstol y el Tío Ho símbolos de la hermandad de dos pueblos pequeños unidos por una inmensa tradición de lucha. Martí en el Caribe y Ho Chi Minh en Asia compartieron los mismos anhelos y en ellos estaba la dignidad de aquellos seres irreverentes fieles defensores de la libertad.

Como afirmara Fidel, Ho Chi Minh pertenece a la singular estirpe de los hombres cuya muerte es simiente de vida y perenne irradiación de estímulos. 

El pueblo vietnamita, inspirado en el Tío Ho, propinó una contundente derrota al imperio yanqui que ensayó en esa nación la más perversa maquinaria de destrucción. Los cubanos, bajo la guía de Martí y Fidel, también vencimos.