La Habana, Cuba.- La Central de Trabajadores de Cuba y los sindicatos deben concentrarse en lo esencial, que es ejercer su actividad en interés de la implementación exitosa de los Lineamientos y desarrollar un trabajo político-ideológico diferenciado y abarcador en defensa de la unidad de los cubanos.

Así expresó el Primer Secretario del Partido, General de Ejército Raúl Castro, en la clausura del Vigésimo Congreso Obrero, y a ello seguimos convocados hoy, cuando inmersos estamos ya en la venidera cita.

En el escenario actual, marcado por tensiones financieras en el país y la arremetida de Washington contra gobiernos progresistas, particularmente Venezuela, se impone aunar esfuerzos para, cada cual desde su pedacito, reimpulsar la economía y avanzar.

Son tiempos en los que Cuba necesita productividad y eficiencia. Y en esa batalla, el movimiento sindical juega un significativo papel.

Desfiles multicolor y de amor patrio

Como exponía la convocatoria al Vigésimo Primer Congreso Obrero, el encuentro que recién celebramos contribuirá, sin duda, a la consecución de una sociedad socialista próspera y sostenible que por decisión soberana los cubanos hemos decidido construir.

Aún con el fervor del debate crítico pero aportador, amaneceremos en las calles de toda Cuba el primero de mayo próximo, Día del Proletariado Mundial, en desfiles multicolor y de amor patrio.

En carteles y pancartas se alzarán nuestras conquistas, el nombre de Fidel, Raúl y los líderes de la clase obrera.

En consignas, enarbolaremos los sueños que son metas por cumplir, los logros que entre todos podemos alcanzar. Será otra de las tantas fiestas de los trabajadores que hemos vivido en Cuba, y que nos distinguen, por la unidad, el compromiso y la victoria.