El pueblo cubano no puede evitar que le invada el dolor cada octubre. En la memoria vive aquel acto terrorista en las costas de Barbados, que enlutó a las familias de 73 personas inocentes, en su mayoría jóvenes deportistas, sacrificados en la flor de su vida
“Nadie quedará desprotegido”, ha repetido el presidente cubano Raúl Castro una y mil veces. Y aunque la frase original está dada en referencia a la actualización del modelo cubano, sirve también para una contingencia como el azote del poderoso Matthew.
Uno de los creadores del proyecto de ley anti-inmigrantes cubanos, el congresista republicano Carlos Curbelo, declaró a la prensa: “Es un número altísimo de co-autores y no tengo dudas de que lo suscribirá una mayoría bipartidista”.
Aquí, donde hay un millón de graduados universitarios y la enseñanza es reconocida internacionalmente, resulta cuando menos sospechoso que se ofrezcan becas en Estados Unidos a jóvenes cubanos de entre 16 y 18 años.
Hoy no se enfrentan en el planeta dos bloques militares, pero este sigue dividido entre hegemonistas y víctimas de las apetencias absolutistas, y por tanto la lucha reivindicativa mundial no ha cesado ni mucho menos.
Son añoradas por muchos las estaciones en las que asistían a la pelota por placer; transformada actualmente en una caldera de tristes pasiones, polémicas y decepciones, en su sentido más puro y con la carga de pesimismo que ello supone.
Algunos llegan a preguntarse si un ataque como el lanzado por Trump contra Cuba hiere o beneficia. Varios ejemplos –entre decenas- ayudan a contestar la interrogante.
Ni siquiera John F. Kennedy calculó el alcance, duración y perfidia de la Proclama presidencial 3447 firmada en el tres de febrero de 1962 para instaurar el bloqueo.
Las discusiones en Cuba sobre la Conceptualización del modelo cubano de desarrollo y el Plan de desarrollo hasta 2030 lograron traspasar las fronteras de la reunión partidista al convertirse en textos enriquecidos con las propuestas de representantes de todos los sectores de la sociedad.
El bloqueo que desde hace más de medio siglo impone Washington a nuestro país aparece hoy como el principal obstáculo para resolver las compensaciones mutuas por daños y nacionalizaciones.
Una amplia encuesta del sitio digital financiero WalletHub arroja como resultado que la ciudad de Miami no es aconsejable para tener familia por ser violenta, cara y pobre.
Dolorosos recordatorios son los 3.478 cubanos muertos durante los últimos 57 años por esas acciones agresivas, incluidas la invasión de Playa Girón, y todos los actos terroristas que ha sufrido el país, originados en Estados Unidos.
Del acto suicida contra las dos torres del World Trade Center neoyorquino la derecha norteamericana sacó un combate al terrorismo que pasó a ser el centro de la política exterior e interior de Estados Unidos.
Luego del golpe de Estado institucional en Brasil y de las reiteradas denuncias de promoción de la violencia en Venezuela a cuenta de la oligarquía, es evidente que estamos en presencia de una ofensiva derechista regional.
La decisión del derechista Mariano Rajoy de mantenerse como candidato del Partido Popular para formar gobierno en España, hace más difícil el proceso político que apunta a esa meta y se remonta a diciembre pasado.