Matanzas, Cuba. Boris Luis lleva por nombre uno de esos inquietos periodistas de la radio en la provincia de Matanzas, que honra con su nombre a aquel Moncadista asesinado en el asalto a cuartel Moncada.

Una dosis de pasión lo adentra en los vericuentos de la investigación y los audiovisuales por eso ya es padre de un producto comunicativo que bautizó como El Martillo.

Con esas inquietudes acudió a investigar por qué el Sistema de Atención a la Familia (SAF), en Matanzas, carga con algunos improperios, si es un programa humanista de la Revolución.

Cámara y grabadora en manos junto a su colega Félix González vivenció un día en unos de los 87 establecimientos de Matanzas: La Yumurina.

La experiencia que contó Boris Luis Alonso ratifica a la obra humana perfectible, el SAF llegó para quedarse y mejorar sus servicios a las personas vulnerables.