La Habana, Cuba. Tras un año de situación epidemiológica compleja, en Cuba el desarrollo de cinco candidatos vacunales propios contra la COVID-19 es para muchos un tema esperanzador.
Soberana 02, por ejemplo, el candidato cubano más avanzado, es el único de Latinoamérica que se encuentra en fase III de ensayos clínicos, que incluye a 44 mil voluntarios, cuyos resultados hasta el momento son satisfactorios.
Esta última fase de ensayos clínicos se complementa en Irán, con unas cien mil dosis enviadas al Instituto Pasteur de ese país, como parte de la colaboración con otras naciones en el desarrollo de vacunas.
Los expertos aseguran que el objetivo de esta nación caribeña es llegar a cien millones de dosis antes de que termine el año, lo que permitiría cubrir la inmunización de más de 11,2 millones de cubanos y también de los extranjeros interesados en el producto.