El nuevo presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dejó entrever la posibilidad de instalar una base militar de Estados Unidos en el gigante suramericano.
Según Bolsonaro su acercamiento a Estados Unidos resulta por el sector económico, pero puede ser bélico también y no se trata de un super poder en América del Sur, sino de tener supremacía.
Analistas revelan que desde que asumió el poder el 1 de enero, el mandatario brasileño dio un brusco cambio a la política exterior de su país, en consonancia con la administración del presidente estadounidense, Donald Trump.
Aclaran que siguiendo a su patrón, el Jefe de la Casa Blanca, el ex militar prometió trasladar la embajada brasileña de Tel Aviv a Jerusalén y reitera que desea tener nexos más próximos con el gobierno norteamericano e Israel.