La habana, Cuba. – Como consecuencia del paso por Cuba de los huracanes Oscar y Rafael, el daño económico es importante, pero hay confianza en la recuperación, afirmó el ministro de Economía y Planificación, Joaquín Alonso Vázquez.
Ante medios de prensa nacionales y extranjeros, explicó las características de ambos eventos hidrometeorológicos extremos, cuyas afectaciones fundamentales abarcan las áreas de la vivienda, la electricidad, el agua, la salud, los viales y el sector agropecuario.
Informó que, según cifras preliminares, más de 34 mil viviendas tuvieron daños totales o parciales, por los efectos de los ciclones y del sismo en el suroriente del país, con Guantánamo y Artemisa como las provincias más golpeadas.
El titular de Economía mencionó los considerables perjuicios en la red de energía eléctrica, instalaciones de salud y la agricultura, donde se estiman pérdidas en 35 mil hectáreas de cultivos.
Respuesta ante la contingencia
En información ofrecida este jueves en la sede de la Cancillería, el ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Oscar Pérez-Oliva, agradeció la ayuda internacional que recibe Cuba ante los recientes desastres naturales.
Reconoció la inmediata contribución del sistema de la ONU para los damnificados y los aportes de gobiernos, empresarios extranjeros radicados en nuestro país y compatriotas en el exterior.
Destacó la contribución de organizaciones solidarias como The People Forum, que entregó 100 plantas eléctricas para darle vitalidad a centros fundamentales, así como la reacción de inversionistas extranjeros al poner equipos en función de la recuperación.
La ayuda internacional está centrada en prioridades definidas por el país, como recursos que favorezcan el sistema eléctrico nacional, el suministro de combustible, insumos médicos, alimentos y bienes personales.