La Habana, Cuba. – El libro, escrito por John Bolton, un funcionario conocido por los cubanos por su trabajo en las administraciones de los presidentes estadounidenses Ronald Reagan, George Bush, padre, George Bush, hijo y Donald Trump ilustra, en sus más de 500 páginas, el caos en el que se convirtió la administración del empresario Presidente.

El texto no ahorra críticas a nadie, dispara contra tirios y troyanos. Entre los agredidos se encuentran, el secretario del tesoro, Steve Mnuchin, la embajadora ante las Naciones Unidas, Nikki Haley y Rudolph Giulianni, abogado personal del Presidente. Quien único escapa del fuego graneado del autor es él mismo.

Bolton es tristemente recordado en nuestro país por su papel en la acusación fabricada a inicios de siglo contra Cuba de participar en un programa de creación de armas biológicas. Aquella patraña fue desmentida por el expresidente Jimmy Carter. Fue designado embajador de los Estados Unidos ante la ONU, aún sin ser aprobado por el Congreso, ocasión en la que se ganó el rechazo de los propios diplomáticos estadounidenses, así como de otros países, ya que su quehacer cotidiano se avenía muy bien con aquello de ser un elefante enfadado en una cristalería.

El autor del libro, quien no peca de modestia, está considerado como uno de los super halcones de la política estadounidense, aunque se debe señalar que evadió servir en las fuerzas armadas de su país durante la Guerra de Vietnam. Le viene bien aquel dicho de: “haz lo que digo y no lo que hago”.

En las páginas del texto el escritor muestra sus dotes de intrigante, mendaz y poco amigo del trabajo en equipo. Se aborda el periodo de tiempo de la Administración Trump, que va desde que se comienza a hablar de la posible designación de Bolton como Secretario de Estado, su sueño no logrado, o Asesor de Seguridad Nacional.

Se dedican capítulos a su entrada a la Casa Blanca, el proceso negociador y las conversaciones con la República Democrática y Popular de Corea, su participación en varias reuniones cumbre, su animadversión por Rusia, las contradicciones con el presidente Trump en cuanto a la salida de las tropas estadounidenses de Afganistán y Siria, su obsesión por derribar a los gobiernos de Venezuela y Cuba y a el affaire con Ucrania.

La línea argumental del libro es las intrigas palaciegas de la administración Trump, dignas de una novela de Shakespeare. Se remarca que el único interés de ese Presidente era su reelección, así como su olímpico desconocimiento y desinterés por los temas de política exterior.

A todos aquellos que les interese conocer sobre como funciona la maquinaria política de los Estados Unidos e ir más allá de lo que cuentan series televisivas como “The West Wing”, “Madame Secretary” y “House ofcards” entre otras, les recomiendo la lectura de este texto, el cual les permitirá adentrarse en el comportamiento errático de la Superpotencia en declive.

Recuerde, si me ven por ahí, me saludan