La Habana, Cuba. – La inflación se ha convertido en un fantasma que recorre el mundo. En Europa, lindero del conflicto en Ucrania, el Índice de Precios al Consumidor vuela como consecuencia de la inestabilidad de los mercados globales.

Hay niveles inéditos de inflación para los europeos, por la subida en flecha de los precios de alimentos y combustibles.

En la llamada Euro Zona los mayores problemas económicos hoy se concentran en Lituania, Estonia, Letonia, Bélgica y Eslovaquia, donde los números inflacionarios van desde casi catorce por ciento hasta poco más de ocho. Pero gigantes como Alemania tampoco escapan y registran un aumento de precios superior al siete por ciento, una cifra inédita desde la reunificación, hace más de treinta años.

También en Estados Unidos ese pernicioso fenómeno hace que la gente se rasque los bolsillos.

Subida de precios

Aunque el conflicto en Ucrania aceleró las cosas, los precios mundiales crecen desde mucho antes que empezarán a tronar los cañones.

Subieron como efecto de la pandemia, que trastocó a la economía global, al romper las cadenas de suministro por la paralización productiva y de las navieras. Y aunque ahora el Banco Central Europeo dice que la inflación es un fenómeno pasajero, otros economistas advierten que demorará la recuperación y habrá una transformación profunda de la economía planetaria.

Lo cierto es que en la actualidad la inflación está disparada en todo el mundo, aunque no en todas partes tiene la misma intensidad, pero como siempre las naciones del Sur empobrecido son las que más sufren.

Habrá que ver entonces cómo evoluciona la economía mundial en un contexto de pandemia y conflicto bélico, que no augura nada bueno.