Eran los finales de 1956 y el movimiento revolucionario se apuntaba el levantamiento del 30 de noviembre, el desembarco del yate Granma y el combate de Alegría de Pío
En la Mayor de las Antillas se recuerda uno de los hechos más horrendos de la historia nacional conocido como Pascuas Sangrientas. En este triste suceso de 1956, fueron asesinados 23 jóvenes revolucionarios durante 4 días, ordenados por el dictador Fulgencio Batista
El 23 de diciembre de 1956, en el lugar conocido por La Portada de Nicaro, provincia de Holguín, cayó asesinado por la tiranía batistiana Rafael Orejón Forment
La orden del coronel Fermín Cowley, jefe de la guarnición de Holguín, era precisa: Asesinar a los principales dirigentes del 26 de Julio, del Partido Socialista Popular y de otras organizaciones que operaban en ese territorio, comenzando pasada la media noche del 24 de diciembre de 1956 hasta la madrugada del 25
La orden del coronel Fermín Cowley, jefe de la guarnición de Holguín, era precisa: Asesinar a los principales dirigentes del 26 de Julio, del Partido Socialista Popular y de otras organizaciones que operaban en ese territorio, comenzando pasada la media noche del 24 de diciembre de 1956 hasta la madrugada del 25.
