Cualquier cubano sabe contar al menos una de las tantas historias protagonizadas por Camilo Cienfuegos Gorriarán, que el 6 de febrero de 1932 llegó al mundo en la capitalina barriada de Lawton para convertirse en un ícono de la Revolución cubana.

Hace casi nueve décadas nació Camilo, el carismático luchador que se ganó el cariño de su pueblo. Sus convicciones y su facilidad comunicativa lo hicieron uno de los líderes más queridos durante el proceso revolucionario que trajo a Cuba su definitiva independencia.

Inmortalizada en la historia queda hoy su figura y firmes continúan en los cubanos las ideas del Comandante Camilo, Señor de la Vanguardia.

La historia atesora la frase que sobre él expresara Fidel: hombres como Camilo Cienfuegos surgieron del pueblo y vivieron para el pueblo.