Oscar Sanamé, director de Trabajo y Seguridad Social en la capital agramontina, resaltó las tareas asumidas por esa fuerza, cuyos miembros han llevado la esperanza a personas vulnerables en los sitios más complejos.

Bárbara Yoania Williams, una de las agasajadas, refirió que durante el enfrentamiento a la COVID-19 han centrado la atención en los ancianos que viven solos y en las familias con más dificultades.

Surgido en septiembre de 2000, el Programa de Trabajadores Sociales en Cuba nació con el fin de evaluar el contexto a nivel comunitario para prevenir y transformar los problemas con la participación colectiva.