La Habana, Cuba. En 2005 el devastador huracán Katrina azotó a Nueva Orleans, en Estados Unidos, y dejó alrededor de más de mil 300 fallecidos. Cuba no vaciló en ofrecer ayuda solidaria al pueblo estadounidense.

Como iniciativa del líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, se conformó, para la atención urgente de personas en riesgo de muerte a causa del gran desastre, una experimentada brigada médica, la cual denominó Fuerza Médica Henry Reeve, en memoria de ese excepcional joven combatiente norteamericano que murió luchando por la independencia de nuestro país.

El gobierno estadounidense de turno rechazó el desinteresado y humanista ofrecimiento, lo que no impidió que el 19 de septiembre de 2005, Fidel constituyera el glorioso Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastre y Graves Epidemias “Henry Reeve”. 

Orgullosos de nuestros valientes

Durante estos 15 años, los integrantes del Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastre y Graves Epidemias Henry Reeve han cumplido solidarias y humanistas misiones, entre ellas  figuran las batallas contra el ébola en África y el cólera en Haití, así como la asistencia a las poblaciones afectadas por inundaciones, terremotos y huracanes en varios países.

En estos últimos meses destaca la participación de 52 brigadas médicas cubanas en el enfrentamiento a la COVID-19 en 39 naciones, donde han salvado más de12 mil vidas.

En su aniversario 15, el Contingente Henry Reeve recibe el reconocimiento de nuestro pueblo y de todos los que en el mundo han sido atendidos por los profesionales cubanos de la salud, defensores de la vida, quienes demuestran la vocación humanista de nuestra Revolución.