La Habana, Cuba. – Hay carencias y dificultades, si las hay, pero también la voluntad y el esfuerzo para sortearlas. En los tan nombrados años 90, Fidel dijo y no es una frase hecha, es una convicción. Lo primero que hay que salvar es la cultura.
Un ejemplo de esto son las funciones que ha preparado el Ballet Nacional de Cuba por su 75 cumpleaños. Durante tres fines de semana consecutivos en la sala Avellaneda del Teatro Nacional de Cuba.
La celebración comenzó este viernes 6 de octubre con un magnífico programa, compuesto por Rara Avis, interpretado entre otras por Estefanía Hernández, Grettel Morejón y Anette Delgado; el Pas de deux de La Cenicienta, bailado por María Luisa Márquez y Yankiel Vázquez; Dionaea, ejecutado por Sadaise Arencibia y para cerrar Majísimo con Dani Hernández y Anette Delgado.
Este programa se mantendrá los días 7 y 8 de octubre. Y los próximos dos fines de semana habrá funciones con otras coreografías. Embúllese pase por alto los problemas de transporte, el espíritu debe ser cultivado con lo mejor de la cultura universal, y tomo prestada la conocida frase de Calviño, Vale la pena.
Ah, y se me ve en el teatro, me saluda.