La Habana, Cuba. – El proyecto del Código de las Familias aborda aristas del Programa Nacional para el adelanto de la mujer, que debemos continuar visualizando en los medios, la comunicación y procesos sustantivos, opina la doctora en ciencias Celia Díaz Cantillo, de la Universidad de Las Tunas.

De la violencia de género refiere que está a veces hasta en el horario laboral que le pone el jefe a las mujeres, cuando él quizás tiene un respaldo, pero para ella es el horario de atender al niño.

En la Cátedra de la Mujer tenemos investigaciones acerca de mujeres en cargos de dirección -explica Celia Díaz- y en ese ámbito hay violencia, aunque no sea el maltrato físico ni sicológico.

Las mujeres tienen que aprender a defender sus espacios desde su propio yo -comenta a Enfoque- y esto hay que educarlo, para NO sentirse sumisa ante la pareja o un cuadro, sino con la comunicación que las caracteriza.

Refrendan derechos de la mujer

La profesora de la Universidad de Las Tunas, Celia Díaz Cantillo, considera un paso de avance que el proyecto de Código de las familias refrende explícitamente, con todas las letras, los derechos de la mujer desde los niveles de la estructura institucional.

De ahí el valor del texto que estamos discutiendo -remarca a Enfoque- y no es solo eso, sino que las personas empiecen a acomodar este conocimiento, y a darse cuenta del proceso educativo que está teniendo la población cubana.

La doctora Celia Díaz ve muy significativo en la sociedad que en el documento esté plasmado todo a lo que tienen derecho la mujer, la niña y el niño, en un proceso ascendente.

Para hacer cumplir lo que hoy estamos proponiendo exhorta a tener como actitud ante la vida el pleno desarrollo de equidad e igualdad entre los seres humanos, con paz, respeto y responsabilidad.