Carlos del Porto Blanco
Hay que andarse con tiento en eso de cantar victorias diplomáticas sobre otra nación, porque el cacareo puede deshacer lo que ha logrado hacer la diplomacia. José Martí
El Aula Magna del Colegio Universitario de San Gerónimo de La Habana, fue la sede de la ceremonia de apertura del Seminario Internacional de Diplomacia Cultural. que se celebra del 25 al 27 de marzo. Rogelio Sierra Díaz, rector del Instituto Superior de Relaciones Internacionales, Isri, Raúl Roa García, tuvo a su cargo las palabras d apertura en el cónclave que reune a personalidades de la cultura, la cancillería, parte del cuerpo diplomático radicado en Cuba, profesores y estudiantes del Instituto.
El rector expresó que la Diplomacia Cultural contribuye a la comprensión de los puntos de vista y razones del “otro”, condición sine qua non, para establecer el diálogo. El evento mostrará casos de éxito que puedan ser replicados en otros contextos. Se menciona la importancia de las cancillerías y los ministerios de cultura en esta área, aunque no son los únicos actores involucrados. Se resaltó la importancia de las redes sociales digitales como vector, hoy trascendental, en la emisión y recepción de mensajes e ideas. Todo esto deriva en que deben actualizarse las estrategias diplomáticas tomando en cuenta el escenario anteriormente expuesto.
Sierra agregó que Cuba siempre ha estado dispuesta al diálogo intercultural y ha formado parte de redes de colaboración de diversos tipos. No podían faltar las palabras para recordar a alguien que constituyó un paradigma en este campo, el Dr. Eusebio Leal Spengler, Historiador de La Habana, quien tuvo como Estrella Polar la convicción de que la cultura debe ser un factor determinante en la construcción de un futuro mejor para la Humanidad.
A continuación, se realizó un panel interactivo en el que participaron Abel Prieto Jiménez, presidente de Casa de las Américas, Fernando Rojas Gutiérrez, asesor del ministro de cultura de la República de Cuba y Jorge Fornet Gil, director del Centro de Investigaciones Literarias de Casa de las Américas y presidente de la Academia Cubana de la Lengua, moderados por la embajadora Teresita Vicente Sotolongo.
Fernando Rojas Gutiérrez, hace mención a la Cultura de la Resistencia del pueblo cubano y se remonta en un recorrido al siglo XIX con los ejemplos de Julián del Casal y José Martí, los pintores de la Vanguardia ya en el siglo XX, la participación de varios escritores cubanos en el congreso Antifascista del 1937 en Valencia, España y hace mención a la figura de Raúl Roa que emergía en ese momento. Se resalta la labor inmensa desarrollada por Martí y la trascendencia de la revista Orígenes en la etapa de la pseudorepública. Se destaca el protagonismo que tuvo la cultura y sus principales exponentes en la revolución triunfante, así como el espacio que se le abrió a esa rama del pensamiento humano con ella. Fue en esa etapa inicial de la Revolución que se creó la Casa de las Américas, el Icaic, el Ballet Nacional de Cuba, se imprimió por miles la obra cumbre de la literatura española, El Quijote, entre otras acciones para cimentar la obra revolucionaria. Ahí estaba el pensamiento del maestro, Ser cultos, es la única manera de ser libres.
Se destaca la importancia que tuvieron grandes intelectuales cubanos en el servicio exterior cubano, como Raúl Roa, Alejo Carpentier, Antonio Núñez Jiménez, Fayad Jamís, Lisandro Otero y muchos otros. Se menciona también la participación de Cuba, con carácter activo, en las organizaciones culturales de carácter internacional, teniendo como brújula que la cultura debe ser una herramienta para la paz y la comprensión entre los pueblos.
Y termina Fernando su intervención mencionando el intenso programa cultural que desarrolla el país en la actualidad, ejemplificado con los festivales internacionales de Jazz, Ballet, Teatro, Cine, la Bienal de La Habana y un gran etcétera. Unido a eso se destaca la celebración de las semanas de la cultura o de cine de varios países de todos los continentes y la realización de festivales con artista cubanos residentes en el exterior.
Jorge Fornet Gil por su parte centra su intervención en el papel que ha jugado Casa de las Américas en la Diplomacia Cultural, y menciona una idea cardinal, “Muchas veces los intelectuales hacen diplomacia, sin saberlo”. Agrega que también hay que tener en cuenta la otra diplomacia cultural, la nefasta, que realizan los centros imperiales de poder contra nuestros pueblos. Fornet dedica un aparte a la visión que tuvo Haydee Santamaría en los momentos fundacionales de Casa. Menciona que se comenzaron a crear redes de intelectuales y éstos se comienzan a ver como latinoamericanos, más que como nativos de sus países de origen. Se destaca que muchos de esos artistas y escritores realizaron labores de apoyo a la Revolución Cubana en sus países. Eso resalta la importancia de las relaciones personales en estos procesos. Y cierra Jorge su intervención planteando, que las instituciones no pueden quedarse ancladas en el pasado, hay que percatarse que las grandes figuras del mañana, están hoy entre nosotros.
El cierre de este panel correspondió a Abel Prieto Jiménez, que inicio sus palabras recordando el otorgamiento a Eusebio Leal Spengler de un doctorado honoris causa por parte del Isri. A continuación, toma como elemento inicial de su intervención el Congreso Antifascista del 1937 en Valencia, España, donde participaron varios intelectuales cubanos, jóvenes entonces, trascendentales después. Destaca las palabras de Juan Marinello, cuando dijo “No se puede atacar al fascismo sin atacar a su hermano gemelo, el imperialismo”. El fascismo es anticultural por antonomasia. Abel señala el caso del intelectual brasileño Darcy Ribeiro, quien dijo, Brasil se reconoce como parte de Latinoamérica gracias a Casa de las Américas.
Se menciona a varias personalidades de la cultura cubana que han cumplido misiones diplomáticas, Alfredo Guevara, Alejo Carpentier y otrs. Hay que acudir al trabajo cultural cuando se expande la intolerancia. Se menciona la famosa frase del segundo en la jerarquía nazi, Hermann Göring cuando dijo, “escucho la palabra cultura y me llevo la mano a la pistola”. Y su antídoto, profesada por el pensador venezolano Luis Britto García, “Cuando oigo hablar de fascismo, saco toda mi cultura”. Se menciona la labor de la CIA a finales de los años 40 en la creación de un aparataje cultural para enfrenta a la Unión soviética y los movimientos de Izquierda, recalcando un libro, ya clásico del tema, La CIA y la guerra cultural, de Frances Stonor Saunders.
Abel concluye diciendo, que es vital crear y mantener redes de intelectuales, ya que se viven tiempos de intolerancia, manipulación de las emociones y de la inteligencia. Es importante tener presente las palabras del presidente Díaz Canel cuando llamó a una Vindicación de Cuba permanente. Casualmente el 25 de marzo, se celebran los aniversarios de ese famoso artículo de Martí y del Manifiesto de Montecristi.
Para cerrar la sesión de la mañana, se da inicio al trabajo de la comisión, “Fundamentos, perspectivas teóricas y funciones de la Diplomacia Cultural”, que estuvo moderada por el destacado intelectual cubano Omar González Jiménez. En el primer trabajo presentado por la Msc. Alina Altamirano Vichot y Marian Espinosa Díaz, se hace un recuento sobre los campos de actuación de la Diplomacia Cultural, los inicios del concepto, sus relaciones con la diplomacia Científica, de Eventos, Económica, Publica y Tradicional. Es evidente que las fronteras se difuminan. Se plantea que es una temática complicada y que deben fortalecerse sus bases teóricas.
Un elemento a destacar es la participación de estudiantes del instituto que están trabajando ese tema, una de ellas, es Astrid Denisse Gamboa Rivera. Esta joven abordó el tema desde la arista del papel que debe jugar los jóvenes en este tema. Ejemplifica con el ejemplo de los festivales internacionales de la juventud y los estudiantes.
En la sesión de la tarde se desarrollo el trabajo de la comisión “Casos de éxito en diplomacia cultural: lecciones desde Cuba y el mundo”, que estuvo moderada por la embajadora Teresita Vicente Sotolongo. El primer trabajo presentado correspondió a la investigadora ecuatoriana Rachel Patricia Guerrero León, que expuso el movimiento desarrollado por artistas, personalidades, instituciones y movimientos sociales de Hispanoamérica ante la ocurrencia de un terremoto en ese territorio andino en el 1949.
A continuación, el embajador cubano Pedro Mozón Barata, expuso sus experiencias en esta área, durante las misiones que cumplió en Malasia, Australia y Brasil. Un elemento importante que se resalta es que la cultura no se limita a las bellas artes, pero éstas permiten que el mensaje llegue a nuevos públicos. A partir de su experiencia de vida enumera algunas buenas prácticas que deben considerarse en este campo.
A continuación, la embajadora cubana Liurka Rodríguez Barrios, muestra sus experiencias en Vietnam, Laos y Cambodia. Comenta la implicación que tuvo en el entonces Vietnam del Sur, en plena guerra, las funciones realizadas por el Ballet Nacional de Cuba, el papel de los escritos de Martha Rojas, las canciones de Silvio Rodríguez y el texto de Martí sobre la Tierra de los Anamitas. Se destaca el papel jugado por Melba Hernández en los tres países indochinos. Y se resalta el caso de Viengsay Valdés, cuyo padre fue embajador en Laos, y el tratamiento que se le ha dado en ese país.
Estos fueron algunos de los apuntes de este primer día de sesiones del seminario de diplomacia cultural, que empezó bien.