Pinar del Río, Cuba. – El Comandante del Ejército Rebelde, Julio Camacho Aguilera, aseguró que el Programa del Moncada lo sobrepasamos hace años y que, a pesar del genocida bloqueo de los Estados Unidos, avanzamos.
Pinar del Río es un ejemplo de la Revolución, donde un día nos dimos cuenta que necesitamos un hospital clínico quirúrgico y materno infantil a la vez, edificado en tiempo prudencial.
La provincia, dijo Camacho Aguilera, requería hacer avanzar otros programas como la reforestación, la voluntad hidráulica y el arrocero en los municipios de Los Palacios y Consolación del Sur, y se logró.
Igual sucedió con los viales hacia nuevos poblados y el proyecto de las Comunidades Rurales a cargo de su compañera en la vida y en la lucha, Georgina Leyva Pagán, de cuyo trabajo colectivo surgieron demarcaciones como Briones Montoto y Cuba Nueva.
El 26 y la suma de voluntades
Durante la conversación con el Comandante del Ejército Rebelde, Julio Camacho Aguilera, sobre el Programa del Moncada, clasificó el 26 de Julio como Día de la Insurrección Nacional.
La definición estaba clarísima, porque de Pinar del Río a Santiago atravesaron la isla los jóvenes de la Generación del Centenario, cumplieron la palabra empeñada con Fidel, y la mañana de la Santa Ana atacaron las dos fortalezas de la tiranía de Batista.
Quienes cayeron heroicamente en esas acciones, subrayó Camacho Aguilera, enaltecen hoy con sus nombres a escuelas, hospitales, industrias y colectivos laborales.
Otro de los frutos enriquecedores del Programa del Moncada, plasmado en La historia me absolverá, ha sido la entrega de tierras al campesino y las cooperativas para dejar atrás los latifundios, aseveró Camacho Aguilera.