La Habana, Cuba. – Qué cuestiones deben cambiar o reforzarse en la formación de los maestros, es solo la clase el único espacio de influencia sobre los estudiantes de Pedagogía, qué contenidos no deben faltar para que el futuro profesor responda a las exigencias del momento histórico. Estas interrogantes marcaron el tono del encuentro que sostiene -cada mes- el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, con directivos, investigadores y profesores de la Universidad de las Ciencias Pedagógicas Enrique José Varona.
Milda Lesbia Díaz Masip, rectora de la institución, explicó cuáles fueron las motivaciones que despertaron el interés por el proyecto “La integralidad pedagógica en la formación universitaria de los profesionales de la educación” presentada al Jefe de Estado, que estuvo acompañado por el Viceprimer Ministro, Jorge Luis Perdomo Di-Lella.
«Tenemos que seguir planteándonos qué maestro necesita la sociedad cubana actual, qué retos nos llevarían a que no solo sea un profesional que conozca un poco de sus propias asignaturas, de Matemáticas, de Español, de la Historia, de la Física, de la Química, de la Biología, de la Geografía, sino que también pueda ser capaz de formar integralmente a las nuevas generaciones y por tanto que pueda contribuir a la formación de la personalidad, desde la primera infancia hasta el preuniversitario».
Antes de realizar cambios en los programas de formación, primero se realizó un diagnóstico que midió las concepciones sobre la formación integral, el uso del tiempo libre, la actividad científica tienen alumnos y profesores, además sondeó la opinión de los estudiantes sobre el claustro, la docencia y el trabajo educativo. El profesor e investigador del proyecto Jorge Luis del Pino acotó que se debe tener en cuenta que la muestra seleccionada ha sufrido los efectos de la pandemia.
El experto mencionó brechas en cuanto al nivel de formación cultural, “hay una ausencia de actividades culturales, de visitas a museos, que siempre la universidad programa y no se pudo hacer». En los hábitos de lectura hemos encontrado también algunas brechas, lecturas que quizás en otro momento ya podían haber tenido y que no han podido ser incitadas. En su formación pedagógica general se constata falta de habilidades, por ejemplo, aspectos muy complicados como puede ser el trabajo con familias vulnerables y que ellos no han tenido la oportunidad como en otras ocasiones de poder valorar.
El profesor del Pino manifestó que de todas maneras hay elementos estratégicos más allá de la pandemia. “Tenemos que luchar cada vez más por un profesional que eduque desarrollando, o sea no se trata de dar una clase con un contenido y ya, se trata de que esa clase realmente impacte en el desarrollo, por ejemplo, en la independencia, en la creatividad del estudiante, en la motivación por lo que está haciendo”.
En el encuentro de este lunes, la Dra. Isel Parra Vigo, jefa del proyecto, puntualizó resultados de investigaciones asociadas a este proyecto, entre ellas los “Fundamentos teórico-metodológicos de la formación integral del profesional universitario cubano y de la educación”, el “Perfeccionamiento de la formación profesional pedagógica en la Universidad de Ciencias Pedagógicas, teniendo en cuenta problemáticas evidenciadas durante la pandemia”, el “Análisis socio-pedagógico del Código de las Familias y su Incorporación a la formación profesional pedagógica”, entre otras.
Luego de escuchar las opiniones de varios investigadores y profesores, el Presidente Díaz-Canel consideró que hacer una investigación profunda en todas las carreras sobre el estado de los modelos de formación integral de los estudiantes va a ser muy aportador.
“Todos los temas que ustedes han traído aquí, en los 2 años que llevamos sistematizando este encuentro, han sido importantes, pero yo creo que este tema es el más integral de todos los que se han presentado y tiene una importancia estratégica, primero porque tenemos insatisfacciones en la calidad del graduado que estamos formando y sobre todo en su formación integral, en todas las carreras, no solo en las pedagógicas”.
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El Jefe de estado valoró que el perfil pedagógico se encuentra presente en todas las carrreras, en la forma de argumentar, presentar soluciones, dirigir. Se necesita la didáctica, por tanto exhortó a los organismos formadores a extender la investigación de la Universidad Pedagógica a la enseñanza general y a la superior.
“Si esto lo hacemos bien indudablemente vamos a perfeccionar nuestros modelos de formación para el presente y para el futuro -apuntó el dirigente partidista- pero entonces nos queda la brecha con los que hoy son profesores, que sabemos que no todos tiene esa formación. Sin profesores totalmente preparados no vamos a lograr la transformación que hoy nosotros necesitamos”.
Estamos viviendo otra época que es más exigente, subrayó el dignatario, que de forma puntual caracterizó las tendencias negativas de los tiempos actuales,una de ellas es el impacto de las redes sociales en detrimento del hábito de lectura de contenidos enaltecedores.
El ideal es que el maestro sea una persona culta, que su ejemplo irradie a los alumnos, con valores como la solidaridad, la justicia, la responsabilidad, el patriotismo, esta constituyó la certeza construida durante el intercambio entre profesores de la Universidad de Ciencias Pedagógicas y la dirección del país, espacio a donde debe volver el tema de la formación integral dentro de 6 meses, como lo pidió el Presidente Díaz-Canel.