The Wall Street Journal vuelve a la carga con el trillado cuento de la amenaza militar chino-cubana a Estados Unidos.
El diario, representante del pensamiento de las elites económicas estadounidense, se hizo eco de una tesis del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, que aseguró la existencia de una instalación militar china en el oriente cubano, muy cerca de la ilegal Base Naval de Guantánamo.
Pero más allá de la algarabía mediática, lo cierto es que no es la primera vez que Washington utiliza falsedades para tratar de crear un ambiente que justifique la aplicación de determinadas políticas contra Cuba y China, nación esta última que la Casa Blanca considera como su principal adversario global, como está declarado en la Agenda de Seguridad Nacional.
Y de la hostilidad hacia nuestro país sobran palabras porque el bloqueo habla.
Mentira sobre mentira
Washington tiene una larguísima lista de mentiras sobre Cuba, que incluye desde la negación de la existencia del bloqueo, hasta la falsa acusación de que aquí se construyen armas químicas o los famosos ataques sónicos contra diplomáticos en La Habana.
En el caso particular de las relaciones con China, hace exactamente un año, el mismo Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, que por cierto tiene sede en Washington, alegó un supuesto acuerdo en materia militar de Cuba con Beijing para la instalación de una base de espionaje.
Todas esas alegaciones han sido rotundamente desmentidas por los gobiernos cubano y chino, pero no olvidemos que estamos en plena campaña electoral y Biden ve peligrar su reelección. Así que a nadie le extrañe que The Wall Street Journal haya echado mano a otro cuento chino.