El Instituto Nacional de Recursos Huidráulicos bombea agua potable de forma ininterrumpida a las provincias de Camagüey, Las Tunas, Holguín, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo para garantizar el vital líquido a esos territorios.
El territorio de Ciego de Ávila solo cuenta en sus embalses con el 25 por ciento de la capacidad total de almacenamiento de agua, resultado de la fuerte sequía que afecta esa región de Cuba..
Una línea investigativa impulsada por el Instituto cubano de Ecología y Sistemática utiliza invertebrados para evaluar la calidad del agua en los ecosistemas de agua dulce, lo cual resulta más económico.
La delegación de Recursos Hidráulicos en Camagüey ejecuta cerca de la mitad del crédito de 40 millones de dólares otorgado por Arabia Saudita, en labores para mejorar el abasto de agua a esa ciudad del oriente cubano.
La provincia de Ciego de Ávila se mantiene entre las más afectadas por el déficit de precipitaciones con varios sectores en alarma y alerta y un manto freático por debajo del 40 por ciento de su capacidad.
Rafael González-Abreu Fernández, especialista principal de la empresa de Aprovechamiento Hidráulico, puntualizó que las obras se beneficiarán a través del canal trasvase Zaza-Ciego de Ávila, y de los escurrimientos naturales que se producen en la cuenca Sur.