La Habana, Cuba. – Las ventajas que puede conllevar la meditación como actividad sistemática, consciente y planificada son muchas.  Y el resultado no solo está para el ser humano en el ámbito físico, sino también en el universo de las emociones.

Está probado con más de un estudio que esta práctica ayuda a la reducción del estrés y la ansiedad, ya que favorece la reducción en el organismo de los niveles de cortisol, la conocida hormona del estrés.

Asimismo, mejora la atención y la concentración, y puede ser útil para realizar tareas y resolver problemas de manera más efectiva. Es importante destacar que cualquiera puede meditar, y cualquiera puede aprenderlo.

La meditación es una actividad accesible y no requiere habilidades especiales. Una persona, independientemente de su edad, género, religión o cultura, puede instruirse en la meditación y experimentar sus favores. 

Con tiempo y paciencia

Como es sabido, la meditación mejora la calidad de vida y la resiliencia humana ante situaciones difíciles.

De igual forma, contribuye a la salud física, pues favorece la reducción de la presión arterial, posibilita una mejor digestión y disminuye el umbral de los dolores crónicos.

De modo que puede definirse como una herramienta valiosa para que las personas se mantengan estables y centradas en el presente. Según han expuesto practicantes y expertos en este ejercicio de origen ancestral, la meditación, para su buen resultado, requiere tiempo y paciencia si queremos desarrollarla y dominarla.

Se sobrentiende que en un principio, es normal que se tengan dificultades para concentrarse y controlar la mente, y es común sentirse frustrado o distraído. Sin embargo, con su adiestramiento y la paciencia, es posible aprender a controlar el cerebro y obtener todos sus beneficios.

Etiquetas: - -