Más que merecido es el homenaje que, desde el pasado día 8, todo el pueblo cubano tributa a los trabajadores de la salud en el combate a la pandemia de la Covid-19.

La jornada se extenderá hasta el 15 de enero, Día de la Ciencia Cubana, y permite homenajear a esos científicos cubanos que emplearon largas horas en encontrar, no uno, sino cinco candidatos vacunales para contrarrestar la letalidad que provoca el Sars Cov Dos.

Igual reconocimiento reciben médicos, enfermeras, tecnólogos de la salud, estudiantes, la Premio Nobel Brigada Henry Reeve, y todo aquel vinculado al combate contra el nuevo coronavirus, porque esta ha sido una batalla de muchos.

Una lucha que siguió los preceptos de nuestro querido Comandante en Jefe, para quien la vida del ser humano siempre estuvo por encima de todo.

La mejor manera de retribuir

Cuba va camino a superar la pandemia de la Covid-19, gracias a los inmunógenos desarrollados por nuestros científicos.

Pero, ¿cómo retribuir tal hazaña? La mejor manera de aplaudir el desvelo de los profesionales de la ciencia y de todos los trabajadores de la salud durante la jornada que los reconoce es mantener las medidas higiénico-sanitarias, el uso correcto del nasobuco y el distanciamiento físico en lugares públicos, para evitar retornar al triste episodio de tantos fallecimientos, como los ocurridos este año.

No podemos olvidar las críticas condiciones en que la dirección del país ha enfrentado esta lucha contra el Sars Cov Dos, como tampoco que estar vacunado no impide el contagio. Pongamos todos de nuestra parte y tengamos presente que el mejor homenaje sería respetar el sacrificio hecho por los trabajadores de la salud.

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