La Habana, Cuba. – Estimado lector, el pasado mes nos referimos a las funciones de un Asistente de Dirección. Pues en esta revista, a propósito de la celebración del Día de las Madres, conoceremos un poco más sobre la importancia de esta persona en una producción de cualquier índole, además de resaltar cómo las madres cubanas se crecen ante las circunstancias de la vida y frente a la responsabilidad laboral.

Con tal propósito entrevistamos a Yaumara Caridad Ferrer Argudín, quien se desempeña como Asistente de Dirección de espectáculos musicales y dramatizados desde hace 17 años.

Son muchas las anécdotas buenas y malas acumuladas en tan largo periodo, pero la experiencia no la cambiaría por nada. Los Lucas, por ejemplo, Yaumara lo considera su hijo varón del que no podría desprenderse, mientras los dramatizados le dejan un buen sabor de boca por la empatía y cariño que establece con actores y equipo técnico.

La responsabilidad de decidir

Ya conocemos que el Asistente de Dirección es el encargado de chequear y tener todo listo en una producción antes de la llegada del director. Es el enlace entre éste y los artistas, además de los técnicos.

“Pero además, tan estrecha relación tiene que existir entre el director y su asistente de dirección, que en ocasiones ha sucedido que el director ha tenido que ausentarse por equis problema y el asistente tomar su lugar”, nos explica Yaumara, quien agrega: “También tienes que ser capaz de tomar decisiones, a veces drásticas, en momentos cruciales, porque es muy grande la responsabilidad de que todo salga bien y en tiempo. Por ejemplo, recuerdo un Premios Lucas que se filmó en vivo en el Carlos Marx, donde tuve que suspender a una de las agrupaciones que abría con un fishuring, por la tardanza de un músico que llamé en varias ocasiones y no llegaba; y aunque no lo parezca, eso también educa a los artistas en la responsabilidad y puntualidad ante el trabajo. En otra ocasión, tuve que –literalmente- casi arrancarle la ropa a una artista que llegó a punto de salir a escena, para ponerle el vestuario. Son situaciones muy tensas que tienes que tener la capacidad y habilidad de resolverlas de inmediato”.

Trabajo y maternidad de la mano

Programa de RTV Comercial Sonando en Cuba

Pero de responsabilidad y compromiso con el trabajo, y de crecerse ante las dificultades, sabe muy bien Yaumara. Siendo muy joven y recién parida de su primera hija, en la serie Mucho Ruido suplió la ausencia de quien se desempeñaba como asistente de dirección. “Ahí llevé actores, extras y figurantes de la forma más digna que se puede hacer, recuperándome de una cesárea y con una bebé de dos meses. Hacía los quehaceres de la casa, iba a la ENA los viernes a enviar al campismo Los Cocos a los extras y figurantes que eran estudiantes de espectáculo. Y no contaba con mi esposo, pues era el sonidista de la serie y estaba en el campismo. Pero hasta allá también tuve que ir con la niña, y ya sin casi leche materna, tenía que darle helado, o esperar a que se durmiera para poder trabajar.

Pero mi prueba más dura, teniendo 22 años y ya siendo mamá, y que considero mi graduación como Asistente de Dirección, fue Adrenalina 360, una serie que entre pre, filmación, y pos duró 2 años. La niña estaba pequeña, se enfermaba bastante y tenía que ir con ella al rodaje detrás del Clínico de 26 y en la Rampa porque también su papá era del equipo técnico como sonidista. Tuve que lidiar con muchísimos actores, incluso mayores que yo, a los que tuve que exigirles y también dirigirlos prácticamente, porque además fue una serie muy larga de 73 capítulos y yo era la Primera Asistente de Dirección.

La necesaria pero frustrante ausencia

Pa’ que suene

Tras un largo periodo sin realizar dramatizados, Yaumara acaba de concluir el rodaje de Valientes, dirigida por Heiking Hernández, donde se desempeñó como productora de rodaje. “Esa especialidad también la había estudiado pero no la había ejercido hasta ahora y puedo decir que me gustó mucho”, dijo.

Se le nota la aflicción y con la voz entrecortada nos cuenta: “Una vez más estuvo el sacrificio, las frustraciones como madre. Cuando trabajas dramatizados son doce horas, y a veces más, por eso te pierdes mucho de esa primera infancia de los hijos que es tan importante. Tengo otra niña de tres años. La dejaba dormida a las cuatro de la mañana y cuando regresaba ya prácticamente se dormía, así que no podía pintar o jugar con ella. La mayor está en séptimo grado y casi no pude estar presente, aunque gracias a la comunicación con los maestros, vía whatssap, pude estar al tanto de sus estudios. Ahora ella lo entiende un poco porque también se inclinó hacia el arte, primero con la música y ahora con la actuación, pero es muy difícil, tanto para los padres como para los hijos, que son quienes más sufren esa ausencia”.

Yaumara y su esposo Maikel, ingeniero de sonido

Pese a los sacrificios, Yaumara se siente retribuida con la incorporación a su vida de buenas amistades. “Ahora mismo en Valientes tuve mucha empatía con dos protagonistas: Ernesto Codner, al que ya conocía de Eco Dance y su participación en espectáculos, y con Roberto Romero. Ambos, jóvenes muy buenos y talentosos. “Valientes” me hizo recordar tantas cosas de los dramatizados que cuando terminamos me pasé una semana bastante triste porque se extraña al equipo, a todos. Y ahí te va una anécdota. Durante el proceso de pre, la directora me pidió que fuera la mamá de Ernesto en la serie y acepté, pero fue tanta la química con Roberto que me pidió encarecidamente que hiciera de su mamá porque dice que me parezco a ella. Pero al final, y para no crear celos entre él y Ernesto, opté por no asumir el rol… sí, porque ¡hasta actuamos si es necesario!.” exclama.

A Yaumara la marcó mucho Super 12 porque fue el primer programa que la acogió en la televisión en el 2005, gracias a Julio Fuentes, a quien le agradece por la confianza que depositó en ella. No puede dejar de reiterar Adrenalina, como tampoco deja de mencionar los trabajos que hizo con Gloria Torres, a quien considera una súper directora. “Ella fue mi maestra en todo lo referente a música, lo poco que sé sobre eso se lo debo a ella, con quien me fue genial porque aprendí muchísimo. También agradezco inmensamente a Cruzata porque me enseñó todo lo referente al espectáculo”, dijo quien ya ansía comenzar con los próximos “Lucas”.