Aún no hace un año que está en Cuba, sin embargo ya se convirtió en un oyente de Radio Reloj. El señor Loro Horta, nuevo embajador de la República Democrática de Timor Leste en Cuba, visitó nuestra emisora y habló sobre sus impresiones.
El distinguido invitado confesó que cuando sintonizó por primera vez la emisora de la hora y las noticias, creyó que había alguna interferencia, porque se escuchaba a trasfondo un tic-tac; y para quien no tiene un oído adaptado al estilo radiofónico de Radio Reloj, parecía que había ruido.
“Si quieres saber lo que pasa en Cuba y en el resto del mundo, no hay mejor opción que escuchar esta agencia radial -confiesa- porque a través de un estilo claro, directo, corto, te informas”.
Para una persona que tiene poco tiempo como señor Horta, parece que Radio Reloj es la medida perfecta, porque en poco tiempo te enteras de muchas cosas.
“Ya he escuchado algunas noticias relacionadas con mi país, e irónicamente, yo era el protagonista, porque reseñaban visitas de cortesía a diferentes provincias de Cuba”, refiere el visitante.
El embajador de Timor Leste expresó que le impresiona la cobertura tremenda que logra esta planta radial, porque noticias de cualquier parte del mundo, de los países más lejanos, encuentran eco en Radio Reloj, a diferencia de otros medios de prensa que solo se enfocan en regiones determinadas e intereses puntuales. “Por eso me alegro que países pequeños como el mío sean protagonistas también en esta emisora netamente informativa”, dijo.
“Lazos de amistad y cooperación unen a Cuba y a Timor Lester. El diplomático recuerda una promesa del Comandante en Jefe en el 2002, cuando esa nación se declaró independiente, y solo contaban con 30 médicos, Fidel Castro dijo que ayudaría a la formación de médicos timorenses, y ya es una realidad, porque 911 especialistas de la salud han vuelto a nuestro país graduados en Cuba. Por eso creo que ya para el próximo año, la promesa del Comandante será cumplida, y lo agradecemos, estamos conscientes de que ningún otro país hubiera formado tantos médicos, bien preparados, como lo hizo Cuba”, rememora.
