La Habana, Cuba.- El alcoholismo es un problema médico y social, pero también alimentario, pues el alcohólico abandona sus hábitos de alimentación y su organismo paulatinamente se queda sin los nutrientes esenciales para una buena salud.

Afirma el doctor Alberto Quirantes que el alcohol inhibe la absorción intestinal de elementos substanciosos como proteínas, vitaminas y minerales, por lo cual el adicto puede sufrir una severa desnutrición.

El Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Salvador Allende señala que un alcohólico en recuperación no sólo debe dejar de «tomar» hasta su total desintoxicación, sino también debe restaurar su cuerpo a través de los alimentos necesarios para revertir efectos provocados por su adicción.

Enfatiza que es importante beber jugos de frutas ricos en fructosa, como de tomate y naranja, pues constituyen una ayuda para eliminar el alcohol del organismo.