La creación de la Oficina del Conservador en la villa de Trinidad, fundada en 1514, es hoy un hecho al ser aprobada por el Consejo de Ministros tras más de dos décadas de propuestas.

La respalda el Decreto 346 de este año, y su misión está en velar por el cuidado, la restauración patrimonial y el desarrollo cultural, social, físico y económico de manera sostenible en la Zona Priorizada para la Conservación.

Tendrá entre sus objetivos, además, preservar la memoria material y espiritual de la ciudad, así como formular y proponer los planes de ordenamiento urbanístico para el desarrollo integral, y monitorear su implementación.

Proteger los valores de la cuarta de las 7 primeras villas fundadas por los conquistadores españoles en la isla, y garantizar la capacitación del personal especializado vinculado al rescate cultural, son otras de las intenciones.