La Habana, Cuba. – En Cuba hace enormes esfuerzos para mantener la generación de electricidad, un proceso costoso que hoy se realiza en un contexto de aguda situación económica y redoblamiento del bloqueo, aseveró Liván Arronte, ministro de Energía y Minas.

Señaló en la Mesa Redonda que cuando la disponibilidad de la generación eléctrica no cubre la demanda hay que afectar el servicio para poder mantener una reserva, que permita garantizar la estabilidad del sistema.

Sobre el parque de generación, el titular de Energía y Minas detalló que nuestro país cuenta con ocho centrales con veinte bloques en operación, en su mayoría con 35 años de trabajo, los cuales constituyen la generación base del sistema eléctrico.

Sostuvo que Cuba destina un grupo importante de sus escasos recursos financieros para el mantenimiento de las centrales termoeléctricas, así como para sostener la generación y comprar combustibles.

Sobre las causas de las afectaciones eléctricas

Muchos factores influyen en la vida útil de un bloque de generación eléctrica, como la calidad de su fabricación, la prestación del servicio, o la disciplina tecnológica con que se opere.

Edier Guzmán, director de Generación Térmica de la Unión Eléctrica, recordó que muchos de nuestros bloques queman combustible crudo cubano, que tiene hasta un ocho por ciento de azufre, lo cual conlleva a acortar los ciclos de mantenimiento, por la agresividad que provoca la formación de acido sulfúrico al interior de las calderas.

Ante interrogantes de por qué la termoeléctrica holguinera, conocida como Felton, sigue saliendo del Sistema Electroenergético, explicó que ha sido por fallas en las calderas, pues ese bloque está en la etapa de ajuste y puesta en marcha.

El directivo apuntó que hoy el alto índice de averías o la salida imprevista de los bloques incide en las afectaciones del servicio eléctrico.