La incertidumbre era imposible de evitar. Cuando este domingo inició el Salto con Pértiga en los Juegos de Barranquilla, una de las mejores atletas cubanas de la última década acaparaba la atención.

Para Yarisley Silva el concurso marcaría o un nuevo eslabón en su inestabilidad durante las últimas temporadas, o un triunfo de hegemonía.

La televisión no le siguió en vivo, pero en el estadio y en la sala de prensa sí, con el susto y la esperanza mezclados, pues Silva fue la que inició a mayor altura.

Cumplió en el primer intento, le igualó la venezolana Robeislis Peinado, tomó la delantera nuevamente, y ya, todo parecía muy simple. Solo con dos saltos extendía su reinado, pero lo intentó de nuevo y mejoró su record para estas citas, 4, 70 metros.

Yarisley Silva se mostró heroica, como pocas que saben levantarse tras duras caídas, gigante, magna.