La Habana, Cuba.- Compañeros de faena, amigos y admiradores colmaron las salas de exposiciones transitorias del Museo Nacional de la Danza, en La Habana, para acompañar a Alicia Alonso en el homenaje que le dedicaron los artistas Jesús Lara Sotelo y Francis Fernández Trujillo, por los 96 años de la gran estrella del ballet.

La muestra -titulada Bravo, Alicia- la conforman una decena de obras -en su mayoría pinturas con técnica mixta- que recrean el rostro, los gestos y los personajes que la legendaria bailarina cubana engrandeció con su arte sublime.

Al agasajo se sumaron la soprano Johanna Simón y el pianista Frank Paredes con temas del maestro Ernesto Lecuona.

Fue el preámbulo de este miércoles, cuando suma otro año a su fecunda vida una mujer que amplió los horizontes del ballet y fomentó su apreciación por todo un pueblo. Ése que reconoce en Alicia un símbolo de grandeza artística, humana y patriótica.