La Habana, Cuba. – Como la expansión de la COVID pudo controlarse gracias a la vacunación, algunas personas –ignorantes o mal informadas, claro está- afirman que el coronavirus ya pasó, que ya no existe.
Mas, este sigue dando qué hacer con sus mutaciones, que continúan enfermando a muchas personas en el mundo. Tan es así que ahora aparece una nueva cepa de elevada transmisibilidad, pues contagia incluso por portadores sin síntomas.
Se trata de la llamada XFG, descendiente de la cepa Ómicron e identificada también como Stratus, sobre cuya propagación global ya había advertido desde mayo la Organización Mundial de la Salud.
Debido a su alto nivel infeccioso, nuestras autoridades sanitarias han advertido que es muy probable su circulación en Cuba, por lo que la población no debe confiarse y no bajar la guardia, llamado emitido por el doctor Francisco Durán, director de Epidemiología.
Prevenir es posible
Dolor de garganta, ronquera, fiebre ligera y, en algunos casos, molestias digestivas, son los síntomas más comunes de la nueva variante XFG, descendiente de la Ómicron, manifestaciones clínicas similares a las de las cepas anteriores del coronavirus.
El doctor Durán insistió en que, a pesar de que las vacunas cubanas anti-COVID como Soberana y Abdala han demostrado mantener efectividad, es determinante retomar las medidas preventivas.
Para que la también llamada Stratus no gane terreno ante la facilidad con que esta subvariante se propaga, recomendó volver al uso de mascarillas o nasobuco en lugares cerrados, aglomeraciones o transporte público, así como el lavado frecuente de manos.
En caso de síntomas respiratorios, también sugirió evitar salir a espacios públicos y mantener el distanciamiento físico. Por tanto, la COVID sigue presente y prevenirla es posible.