Compartir

La Habana, Cuba. – Lo acontecido en Mangos de Baraguá, Santiago de Cuba, y protagonizado por el Mayor General Antonio Maceo hace 144 años, representa la vergüenza incorruptible de los cubanos y retrató la voluntad de no cejar en el empeño de batallar hasta conquistar la independencia y eliminar la esclavitud.

Ante la falacia del enemigo, en ese caso el régimen español, Maceo y un grupo de rebeldes mambises patentizaron que la lucha continuaría, aunque concretamente hubiera un alto.

La Protesta de Baraguá derrumbó moralmente el Pacto del Zanjón, acuerdo fallido que no contemplaba la importancia de la lucha de liberación.

Fue oportuno Martí cuando al referirse a ese pacto sentenció que habíamos dejado caer la espada; y sobre Baraguá fue certero al señalar que tenía ante sus ojos el documento más hermoso de la historia de Cuba.