El astrónomo, matemático y físico inglés Edmund Halley, nació en Haggerston, Shoreditch, cerca de Londres, Inglaterra, actual Reino Unido, el 29 de octubre (según el Calendario Juliano) / o el 8 de noviembre (Según el Calendario Gregoriano) de 1656. Conocido por el cálculo de la órbita del cometa Halley. Fue amigo de Isaac Newton y miembro de la Royal Society.
Su padre fue quien lo ayudó en cuanto a su curiosidad de explorar el espacio, comprándole los más recientes inventos astronómicos. A los 17 años se trasladó a Oxford. Desde muy joven sintió una gran inclinación por las matemáticas e interesado en la investigación de los cielos por el astrónomo real, John Flamsteed. En 1676 publicó en Philosophical Transactions una disertación sobre la teoría de los planetas.
El mismo año se trasladó a la isla de Santa Elena para observar las estrellas del cielo austral y hacer un catálogo de las mismas. Llevó relojes, micrómetros y un gran telescopio refractor de 7.3 metros de longitud que utilizó con gran provecho, pese a las malas condiciones atmosféricas. El resultado fue el Catalogus stellarun australium, publicado en Londres en 1679, obra que tabula la posición de 341 estrellas australes.
Amigo de Isaac Newton, le animó a escribir sus Philosophiæ naturalis principia mathematica. Es posible que en la época de Newton no se hubieran publicado de no haber sido por su amistad con Halley, pues se sabe que al primero no le preocupaba la publicación de su obra. Halley no solo pagó la impresión, sino que se encargó de corregir pruebas y de otras labores editoriales. El libro original se vendió a las librerías por seis chelines, sin encuadernar.
A su regreso de Santa Helena, en 1678, recibió su maestría en Oxford. El mismo año fue elegido miembro de la Royal Society, de la que llegó a ser, sucesivamente, clerk en 1686 y secretario en 1702, pero nunca fue su presidente. Ese honor recayó en Newton en 1703. La teoría de la gravitación universal de Newton le impulsó a calcular por primera vez la órbita de un cometa, el de 1682, anunciando que era el mismo que había sido visto en 1531 y 1607, y anunciando que volvería a pasar en 1758. En su honor se dio al cometa su nombre y que hoy día se le conoce como 1P/Halley.
De 1698 a 1700 recorrió las costas de África austral y de América, ocupado en la teoría del magnetismo terrestre en el barco Paramore, un pink (barco de plan holandés y de formas redondas y amplias, bien adaptado a mares peligrosos). El fruto más importante de esas dos expediciones fue la primera carta de la variación de la declinación magnética, con las curvas isógonas.
Durante la misma pensó en la posibilidad de hacer una estimación de la edad de la Tierra por medio del cálculo de la concentración de sal en los mares, suponiendo que la deposición de todos los ríos terrestres había sido constante a lo largo del tiempo. Más tarde llevó a cabo ese experimento, que arrojó una edad superior a la indicada en la Biblia. En 1712, sin el permiso del astrónomo real, John Flamsteed, publicó un mapa estelar con el material obtenido por éste. En 1725 aparecería una edición autorizada en tres volúmenes, que contaba con la posición exacta de 3000 estrellas determinadas desde el recientemente inaugurado Observatorio de Greenwich.
En 1693 y 1716 publicó en Philosophical Transactions su método para la determinación de la paralaje del Sol por medio de los tránsitos de Venus. En 1718 llamó la atención sobre el movimiento propio de varias estrellas fijas, reflexionó sobre la posibilidad de medir las distancias estelares por medio del paralaje estelar y calculó aproximadamente la distancia existente entre el Sol y Sirio, que estimó en 120 000 veces la distancia entra la Tierra y el Sol. Esos cálculos animaron al astrónomo irlandés Samuel Molineux a intentar medir (en 1725) el paralaje de Gamma Draconis: después de varios meses fracasó en la medición del paralaje de la estrella pero por el contrario su ayudante, James Bradley, descubrió la aberración de la luz.
A la muerte de Flamsteed, en 1720 le sucedió como segundo Astrónomo Real y director del Observatorio de Greenwich, cargo que ocupó hasta su muerte. 1742. La preocupación de Halley por las aplicaciones prácticas de la ciencia, como los problemas de navegación, refleja la influencia en la Royal Society del autor británico Francis Bacon, quien sostenía que la ciencia debería tener como objetivo “el alivio del patrimonio del hombre”. Aunque sus intereses eran muy variados, Halley mostró un alto grado de competencia profesional que presagiaba una especialización científica. Su sabia evaluación de la obra de Newton y su persistencia en guiarla hasta su finalización le valieron un lugar importante en el surgimiento del pensamiento occidental.
Edmund Halley, murió en-Greenwich, Inglaterra, Reino Unido, el 14 de enero de 1742 a los 85 años.
Referencias
- Edmond Halley. Enciclopedia Británica. https://www.britannica.com/biography/Edmond-Halley
- Edmund Halley. Wikipedia. https://es.m.wikipedia.org/wiki/Edmund_Halley