Lima, Perú.- Lo que acaba de suceder en Lima, donde fracasó el previsto Diálogo Hemisférico, es otra señal de la inoperancia de la Organización de Estados Americanos.

La OEA y su Secretario General, Luis Almagro, organizaron ese foro como parte de las actividades de la VIII Cumbre de las Américas. Cuba advirtió desde hace casi un mes la posición de un grupo de personas vinculadas a las organizaciones terroristas, y además financiadas por Estados Unidos

Por eso, la delegación cubana lanzó una dura denuncia  en la sala donde debía sesionar el encuentro  entre representantes de la sociedad civil hemisférica y altos funcionarios de los gobiernos del continente.

Después de dos horas de consignas de los cubanos, a los que se sumaron venezolanos y delegaciones de otros países, los organizadores tuvieron que sacar a los mercenarios del recinto.

Esa cosa tan fea

Tocó de nuevo al embajador cubano Juan Antonio Fernández poner en claro la posición de nuestro país en el Diálogo Hemisférico. Exigimos respeto, porque no podemos permitir que se visibilice a quienes tratan de usurpar la legítima representación de los cubanos, aseveró Fernández.

No hubo entonces diálogo, que fracasó estrepitosamente ante la combatividad de una delegación, que llegó a Lima dispuesta  a la discusión constructiva y respetuosa, pero que antes había advertido que no permitiría provocaciones.

Todo fracasó y muchos volvieron a recordar aquella vieja guaracha de Carlos Puebla y sus Tradicionales: Como no me voy a reír de la OEA, si es una cosa tan fea.