La Habana, Cuba. – En el día del aniversario 94 de la Radio Cubana, dos reconocidos profesionales que han dedicado su vida al medio, Antonio Moltó Martorell y Fernando González Castro, recibirán el Premio Nacional de Radio 2016.

A propósito de la fecha, Radio Reloj dialogó con uno de los laureados, Antonio Moltó, para quien la radio fue un descubrimiento fantástico, a la que llevó el fervor, el apuro y la energía de un joven de 25 años.

El presidente de la Unión de Periodistas de Cuba rememora sus inicios en el medio, en la emisora santiaguera CMKC, donde encontró a su primer maestro de periodismo, Carlos Selva Yero, y aprendió el apego a la verdad, a lo cotidiano, y que la noticia no la da la institución, sino la gente.

La velocidad de la radio está a la velocidad del pensamiento, significa Moltó, quien se fue enamorando de ella en una relación inseparable de casi cincuenta años.

Una relación inseparable

Un vínculo especial une a Antonio Moltó con el programa de debate Hablando claro, de Radio Rebelde, en el que -afirma- No hacemos de la crítica una diversión, sino una búsqueda de argumentos, hechos y explicaciones.

Sobre el espacio, enfatiza que constituye ingrediente indispensable en una parrilla de programación, es como el picante en la comida, lo que hay que saber administrarlo, remarca el presidente de la Unión de Periodistas de Cuba.

El también director de programas destaca que al público hay que contarle historias, e insiste en una radio movilizativa, de compromiso, con profunda raíz en su nación.

Recibir hoy el Premio Nacional de Radio, junto a Fernando González Castro, será incentivo para Antonio Moltó de seguir soñando y defendiendo un periodismo con visión culta, patriótica, consecuente con el principio de proteger la verdad; y siempre, llevando a la radio en el corazón.