Ante la pandemia los médicos cubanos extienden su ayuda al mundo

La Habana, Cuba. – Por una convención humana, casi siempre nacida de razones histórico-políticas, cada nación estableció sus límites territoriales. Muchas veces esas demarcaciones fueron el fruto del expolio colonial en determinada zona, sin tener en cuenta los intereses de la población autóctona.

Por eso, en el mapa de África hay fronteras que son líneas rectas, que incluso dividen a una misma etnia entre dos países diferentes.

Pero más allá de disparates como esos, lo cierto es que ahora cada gobierno actúa dentro de esos límites que son reconocidos por el Derecho y la comunidad internacional. En esos marcos territoriales las autoridades toman decisiones internas.

Sin embargo, la historia reciente de Cuba demuestra que hay muchas disposiciones del gobierno revolucionario que han tenido una trascendencia que rebasa nuestras fronteras.

Para Cuba y el mundo

El gobierno revolucionario cubano desarrolló un sistema sanitario que es efectivo a pesar de las carencias, y que permite contar con más de 100 mil médicos activos, un promedio de 9 por cada 100 mil personas.

Al mismo tiempo, creó una industria biofarmacéutica autóctona que garantiza una parte importante de los medicamentos necesarios. Esas son las bases que permiten saltar nuestros límites territoriales y ofrecer la actual cooperación internacional en materia de salud, que abarca a unos 29 mil cooperantes en 60 países.

Y como si fuera poco, ahora, en plena emergencia mundial ante el nuevo coronavirus, 14 brigadas prestan ayuda a otros seres humanos cuyas vidas están amenazadas.

Los cubanos salvan y al mismo tiempo demuestran que somos un país sin fronteras.