La Habana, Cuba. – El Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, que desde hoy y hasta el 16 inundará las salas oscuras, regirá nuevamente los destinos de la cultura cubana este diciembre en el país, y a pesar de que lleva en sus espaldas cuarenta ediciones, que podrían parecer demasiadas, llega con nuevos bríos.

Sus objetivos fundacionales, ésos que definieron sus padres en el momento de la creación, siguen en pie.

Socializar las problemáticas latinoamericanas actuales, describir lo más genuino de ella, visualizar sus aspiraciones y propósitos, así como mostrar sus retos y desafíos, continúan identificando al Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano que lleva la impronta de Fidel, Fernando Birri, García Márquez, Alfredo Guevara y García Espinosa, entre otras personalidades.

Valores y riquezas de un Festival

La edición cuarenta del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, que se devela este jueves, es oportunidad para volver a mirar a Latinoamérica y el Caribe con una sabia apreciación actualizada.

Esta importante región del planeta que representa la fiesta de la pantalla grande es la más rica en recursos naturales, la más sufrida y desigual, pero a su vez, la que más tiene que decir y aportar a las nuevas generaciones por sus luchas por la independencia patria.

El Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano ha sembrado valores éticos, principios emancipadores y una cultura del saber y el patriotismo como ninguno.

Hoy más que nunca nuestro Festival Internacional de Cine hace falta para mirarnos por dentro.