La Habana, Cuba. – Celebrada días atrás en San Petesburgo, la más reciente edición del Foro Económico Internacional auspiciado por las autoridades rusas, confirmó la alianza clave que existe entre Moscú y la región de América Latina y el Caribe.

Un entendimiento que, sin dudas, no es bien  visto ni asumido por las fuerzas hegemonistas que pretenden reacomodar nuestra zona geográfica en los viejos esquemas de dependencia en relación con intereses imperiales de factura Made in USA.  De hecho, resulta evidente que los sucesos en Brasil en los últimos tiempos apuntan a debilitar mecanismos de concertación como el Grupo BRICS, formado por precisamente por la nación sudamericana, Rusia, China, India y Sudáfrica, y que sin dudas ha restado importancia global a los mecanismos económicos y financieros de corte neoliberal.

Lazos crecientes

Delegados latinoamericanos presentes en el foro económico internacional de San Petesburgo, recordaron además la complementariedad vigente entre nuestra zona geográfica y Rusia, una potencia con la que se comparte también la aspiración de crear un mundo multipolar y justo.

Personalidades regionales indican que Rusia es un aliado importante para los esfuerzos latinoamericanos y caribeños de alcanzar un desarrollo económico y social sostenible, y ocupar un lugar trascendente en el concierto internacional.

Explicaron que, a pesar de la crisis de los precios del crudo y otros avatares económicos y financieros de orden global, los intercambios regionales con Rusia han crecido, así como la asistencia de Moscú a importantes planes de desarrollo integral de beneficio para nuestra área