La Habana, Cuba. – “En realidad empecé a fumar porque mis amigos lo hacían, y me quería sentir aceptado por ellos”, comenta a la Revista Semanal Luis González, de 19 años, mientras Laura, de 16, expresa que fuma porque la hace bajar de peso.
Esos y otros motivos se encuentran en las encuestas nacionales de tabaquismo en jóvenes realizadas en el país.
Según el estudio, alrededor de un 9, 7 por ciento de los estudiantes de séptimo y noveno grados eran fumadores activos, el 24 por ciento había fumado alguna vez y más de un 10 por ciento eran susceptibles a iniciarse en ese consumo.
Entre las razones planteadas, los jóvenes dijeron que fumar les hacía lucir más atractivos; otros piensan que los hace perder peso y un 93 por ciento cree que es dañino para la salud.
Hincapié en las desventajas físicas
La adolescencia es una época de muchos cambios físicos y en la cual el muchacho o muchacha tiene mayor percepción de su apariencia, por lo que es de suma importancia que los padres hagan hincapié en las desventajas físicas del consumo de tabaco, como dientes amarillos, mal aliento, y mayores probabilidades de desarrollar acné juvenil.
El principal componente químico del tabaco es la nicotina, sustancia responsable de la adicción, por el estímulo placentero que produce al activar la vía dopaminérgica y los receptores colinérgicos y nicotínicos del sistema nervioso central.
El uso habitual de la nicotina hace que, durante el día, se acumulen en el cuerpo elevadas concentraciones que persisten durante la noche.
Según los especialistas, las personas que fuman de forma continua exponen su organismo a los efectos de la nicotina las 24 horas del día.
Problemas que causa la adicción al tabaco
Las principales enfermedades que genera el tabaquismo y que pueden tener 1 de cada 3 jóvenes que prueban el cigarro son las cardiovasculares, ataques apopléjicos, padecimientos gastrointestinales, cáncer en faringe, vías digestivas y pulmonares, entre otras.
Los fumadores tienen tres veces más posibilidades de padecer úlcera péptica o duodenal; mientras que la mortalidad perinatal y los abortos espontáneos aumentan en las madres fumadoras.
La adicción al tabaco es difícil de superar para un adulto- por eso existen tantos fumadores- pero mucho más para un adolescente.
Aunque síntomas como irritabilidad, tensión, nerviosismo e incluso insomnio influyan de forma negativa en su intento de dejar el tabaco, no se dé por vencido, busque ayuda médica, nunca estará solo.