Pinar del Río, provincia eminentemente agrícola, agiliza la campaña de frío la cual se desarrolla en unas 42 mil hectáreas bajo condiciones difíciles debido a la pandemia y el recrudecimiento del bloqueo del gobierno de los Estados Unidos.

Por tal motivo, los hombres y mujeres del campo se auxilian de la agroecología, la ciencia y la técnica más el empleo de la tracción animal, por estar probados los beneficios que proporcionan a los suelos las yuntas de bueyes.

Los agricultores de Pinar del Río aprovechan el primer mes del año, sobre todo en el ámbito de la producción de hortalizas y condimentos frescos, sin soslayar las viandas y granos ante la urgencia de incrementar los alimentos.

Benito Díaz, un productor vueltabajero, dijo que en su caso emplea las variedades mejor adaptadas a una tierra fortalecida mediante abonos orgánicos, cachaza y humos de lombriz.