Ciego de Ávila, Cuba.- Yudianny y Dani son dos niños avileños ciegos, a quienes el bloqueo norteamericano les dificulta su aprendizaje al no tener máquinas braille.

Ellos y otros estudiantes de la escuela especial Aguedo Morales no disponen de ese costoso medio, pues el gobierno norteamericano impide su entrada a Cuba, así como las piezas de repuesto para los aparatos existentes.

Pero las limitaciones no impiden que esos pequeños aprendan a leer y escribir ante las alternativas que buscan los educadores que favorecen las sonrisas de esos avileños discapacitados, aseguró Carlos Rafael Olivera, subdirector de Educación preescolar y especial.

Refirió el dirigente que en Ciego de Ávila hay más de 1400 alumnos en la enseñanza especial, quienes sufren las carencias de materiales escolares y de vida por el bloqueo imperialista.

Daños que deben cesar

En Ciego de Ávila, un grupo de estudiantes sordos e hipoacústicos no poseen amplificadores de sonido para su efectivo aprendizaje, pues el gobierno norteamericano impide la compra de esos equipos.

La administración del presidente Donald Trump también daña a los niños y adolescentes con retraso mental, quienes carecen de materias primas y herramientas necesarias en las escuelas para desarrollar sus habilidades.

Niños limitados físico- motores residentes en la provincia de Ciego de Ávila igualmente son perjudicados por la falta de sillas de rueda, muletas y otros aditamentos para poder asistir más cómodos a las escuelas.

Que cese ya el férreo bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba es un reclamo del pueblo de Ciego de Ávila, y del resto de Cuba y el mundo, para que los niños con necesidades educativas especiales tengan una vida sin privaciones.