Cuba realiza ingentes esfuerzos para salvarles la vida a los pacientes quemados, en especial a los niños, cuyo tratamiento es altamente costoso, porque requiere de antibióticos de última generación y equipamiento.

La doctora Rosa María Pérez, especialista en Cirugía Plástica y Quemado y jefa del servicio en el Hospital Pediátrico Juan Manuel Márquez, explicó que la adquisición de esos medios se ha visto afectada por el bloqueo estadounidense.

El paciente quemado requiere de terapia intensiva, reanimación, antibióticos, equipamientos para extraer la piel, láminas dermo-expansoras, y no se puede obtener en la nación norteña ni en compañías que ese cerco impide el comercio con Cuba.

Precisó que los afectados por quemaduras adquieren infecciones polimicrobianas y multirresistentes, y el bloqueo limita también la obtención de sustitutos de piel, vendaje elastizado, instrumental quirúrgico y nutrientes