El Partido Socialista Obrero Español (PSOE), del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, resultó este domingo el más votado en las elecciones generales celebradas en el país ibérico, aunque sin la mayoría suficiente para gobernar en solitario.

Sánchez, quien asumió el poder el pasado 1 de junio tras ganar una moción de censura parlamentaria contra su antecesor del conservador Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, colocó este domingo al PSOE como primera fuerza política en España, espacio que perdió en 2011.

Con más del 98 por ciento de los votos escrutados, la centenaria organización socialdemócrata consiguió 123 de los 350 escaños del Congreso de los Diputados, por encima de los 85 representantes obtenidos en los comicios de junio de 2016.

La otra formación tradicional, el PP se situó en segundo puesto con 66 bancas en la Cámara Baja, frente a las 137 logradas en las legislativas de hace tres años, lo que se traduce en el peor resultado de su historia.

Con 57 diputados, los liberales de Ciudadanos (Cs) se ubicaron en tercera posición, seguidos por la coalición de izquierda Unidas Podemos, con 42 asientos en el Congreso, la estratégica cámara del Parlamento español encargada de investir al futuro jefe del Ejecutivo.

Como vaticinaron todas las encuestas previas a esta cita con las urnas, considerada la más disputada e imprevisible desde la restauración de la democracia en 1977, el ultraderechista partido Vox irrumpió con 23 representantes.

De esa manera, la formación de extrema derecha alcanzó por primera vez representación parlamentaria a nivel nacional, lo que fragmentará aún más la composición del órgano legislativo.

Tomado de Prensa Latina