El Partido de los Trabajadores de Brasil repudia  la acción judicial abierta el viernes contra los expresidentes Luis Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff, por supuestamente recibir sobornos con dinero de la empresa Petrobras.

La Comisión Ejecutiva del Partido denuncia en una nota que la escandalosa maniobra contra los exdirigentes de la organización política no se sostiene ni con hechos ni con pruebas.

Detalla que a diferencia de lo que afirma la acusación y lo aceptado por el juez, ese órgano es un partido político constituido legalmente desde hace 38 años, el mayor del país por la voluntad de los electores, con una trayectoria de servicios prestados a la democracia, a Brasil y a su pueblo.

Asimismo, la nota refiere que el Partido de los Trabajadores sacó a 36 millones de personas de la miseria, acabó con el hambre, y creó 22 millones de empleos.