El Comité de Puerto Rico en Naciones Unidas alertó sobre la difícil situación que persiste en esa isla caribeña, por los daños causados al paso de dos fuertes huracanes hace seis meses.

Todavía 350 mil residencias se encuentran sin servicio eléctrico, y comunidades enteras no tienen acceso al agua potable, según indica un reporte de la organización boricua.

Las telecomunicaciones -en manos de empresas privadas- enfrentan gran inestabilidad y constantes interrupciones, en tanto las operaciones gubernamentales y de negocios confrontan otras tantas limitaciones, añadió el informe.

Los fenómenos climáticos no solo revelaron el deterioro y la debilidad de la infraestructura, sino también mostraron el déficit de efectivo en las arcas públicas y la lentitud de la respuesta del gobierno colonial, enfatizó el Comité de Puerto Rico en Naciones Unidas.