Brasilia. – La Procuraduría brasileña defendió una pesquisa judicial emprendida en 2021 contra el presidente Jair Bolsonaro, por filtrar este una investigación confidencial.

El Supremo Tribunal Federal abrió en agosto la pesquisa que emplaza al mandatario por revelar, mediante la prensa, detalles sobre un ataque de hackers en 2018 al Tribunal Superior Electoral.

El Procurador General, Augusto Aras, reconoció que el Jefe de Estado reveló un documento confidencial, lo cual tipifica un posible delito previsto en el Código Penal y justifica la necesidad de mantener la investigación.

Según determinó el magistrado, Bolsonaro debió presentarse este viernes a prestar declaración ante la Policía Federal, pero se abstuvo de hacerlo; el gobernante explicó que no acudió a la audiencia bajo el argumento de que el documento sobre cuya filtración se le acusa no era un secreto.