Luego de finalizar este domingo la tregua invernal, miles de familias en Francia deberán afrontar a partir de este lunes la amenaza de que serán expulsadas de sus viviendas, lo que preocupa a organizaciones sociales y humanitarias.

En la noche del 31 de marzo termina esa tregua, que fuera determinada desde el primero de noviembre del pasado año y que prohíbe la expulsión de personas de sus correspondientes domicilios si no existe una solución de reacomodo en un lugar apropiado.

Solamente en 2017, en Francia fueron pronunciadas cerca de 130 mil órdenes de expulsión, de las cuales 120 mil correspondieron a impagos del alquiler.

También insistieron en la necesidad de que se construyeran más inmuebles sociales accesibles a las personas con pocos recursos, así como establecer límites a los alquileres en las grandes ciudades.