Más de un millón de personas protestaron en los 27 estados de Brasil y en el Distrito Federal contra el recorte de fondos en la educación determinado por el Gobierno de Jair Bolsonaro.

El presidente de la Confederación Nacional de los Trabajadores en Educación de Brasil afirmó que las medidas de Bolsonaro son un ataque a los municipios, a los estados y a la población, porque sin inversión en la educación no hay desarrollo.

En Brasilia desde un vehículo de sonido que acompañó la marcha, los oradores se manifestaron a favor de más inversiones en las universidades públicas, y en contra del recorte del 30% del presupuesto en el sector.

En la capital federal los manifestantes se concentraron frente al Museo de la República, en la Explanada de los Ministerios y partieron hacia el Congreso Nacional portando carteles contra las medidas del Ministerio de Educación.