Compartir

Washington, EE.UU. – La Corte Suprema de Estados Unidos falló este lunes a favor del uso de la Ley de Enemigos Extranjeros para la deportación de venezolanos, dejando las manos libres a Donald Trump para actuar en su agresiva estrategia contra los inmigrantes.

La legislación, solo invocada para tiempo de guerra, da a la administración de Trump la potestad para sacar del país a las personas que considere miembros de grupos criminales, decisión que algunos cuestionan al limitar los derechos civiles y constitucionales.

No obstante su decisión,  el Tribunal Supremo impuso como condición que las personas sujetas a deportación bajo esa ley deberán obtener una audiencia judicial antes de ser sacadas de Estados Unidos y contarán con un plazo para demostrar en las cortes que no son miembros de una pandilla.

Los magistrados actuaron en base a la apelación de emergencia del Gobierno, después de que la Corte de Apelaciones en Washington mantuviese vigente una orden que prohibía, temporalmente, las deportaciones de migrantes acusados de pertenecer a la pandilla venezolana Tren de Aragua.