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La profesora Niurka junto a sus alumnos, convencida de que la enseñanza es ante todo una obra de infinito amor.

Niurka López Sánchez es de esas educadoras cubanas que no escatiman esfuerzos para dar lo mejor de sí a sus alumnos. Maestra de 32 niños que cursan el 3er. grado  en la Escuela Primaria Poland-Saborit, en el municipio del Cerro, en La Habana, multiplica ahora las energías para atender a sus discípulos tras la suspensión temporal del curso escolar en Cuba como medida preventiva para evitar la propagación de la Covid-19.

El aprendizaje en el hogar cuenta también con el apoyo familiar, como es el caso de Angelito y su mamá Nathy.

Mediante las teleclases, el teléfono, el grupo en WhatsApp que crearon y la comunicación con y entre los padres, despliega su  quehacer esta abnegada pedagoga, de la cual viven muy agradecidos los padres de sus alumnos, como lo expresan en una emotiva carta que a continuación damos a conocer:

“Al unísono, los padres de los niños que cursan el 3er. grado en la Escuela Primaria “Poland-Saborit”, en el municipio del  Cerro, queremos con esta misiva reconocer, aplaudir sin cesar y entregar nuestro más sincero agradecimiento a la maestra de nuestros hijos Niurka López Sánchez, por toda su dedicación, preocupación  y  el trabajo incansable que brinda a sus alumnos.

Desde el primer día de la cuarentena en que tuvimos que quedarnos en casa, ella tuvo la iniciativa de hacer llegar las clases a cada uno de sus alumnos, sin dejar de ver todas las teleclases correspondientes al grado. Fiel a su misión y con absoluta  entrega a una profesión que lleva en sus venas, transmite a nuestros hijos su deseo de educar y enseñar.

Sus alumnos la adoran con ese cariño infinitivo que solo un niño es capaz de brindar y que no cesan de trasmitírselo cada día al recibir sus clases por teléfono. Ella revisa el cumplimiento de cada tarea asignada por asignatura, sin descuidar corregir los errores que alguno pueda cometer, o felicitar a quienes lo hicieron excelente. Sus palabras siempre van acompañadas de tiernas frases como: “TE QUIERO MUCHO”, “LOS EXTRAÑO A TODOS”, “QUÉDATE EN CASA PARA PODER ABRAZARNOS CUANDO NOS VOLVAMOS A VER”.

Su grupo de 3ero. A,  y los padres de estos niños que son tan nuestros como suyos, nos sentimos más que satisfechos de tenerla. Educamos a nuestros hijos en el día a día juntos de la mano de esta maravillosa mujer, madre, esposa, pero sobre todo MAESTRA. Educadora incansable que motiva a nuestros niños a seguir adelante en esta ardua tarea que hoy nos toca vivir.

Gracias, gracias ¡¡¡mil veces gracias!!!”

Padres y madres de los alumnos del Grupo 3ero. A

La maestra Niurka y sus alumnos semanas antes de que la pandemia afectara a Cuba.